Altazor, publicado en 1931, se puede leer como un «compendio» de los alcances y límites del proyecto creacionista de Vicente Huidobro. Además, se sitúa, junto con Residencia en la Tierra de Pablo Neruda, Trilce de César Vallejo, y Los gemidos de Pablo de Rokha (1918), dentro de las más altas cumbres de las vanguardias latinoamericanas. Altazor rompe con el código de la …